lunes, 15 de agosto de 2016

GAME OVER








   Odio cuando te esfumas como la brisa en plena primavera y vuelves a reaparecer. Odio que lo hagas sin previo aviso. ¿Sabes por qué? Porque a diferencia de otros tú , mi querido talón de Aquiles,  ejecutas una estrategia: Me vas matando, me asfixias.

   Estoy agotada. Agotada de ser yo quien coja el timón de este navío y lo ponga rumbo hacia ti. Agotada de ser la capitana y mover los hilos de una marioneta que no se deja mover. De ponerlo todo en bandeja para que tú ,especialmente, lo tengas a pedir de boca. Alargar el brazo y escoger los platos ya preparados y mascados que TE HE elaborado.

   Cansada, realmente cansada. Te esfumas como el humo del cigarrillo que inhalo cuando estoy con una moral (por los suelos), o como los tantos cubatas de Ron Barceló que me bebo en fiestas sin luces algunas. Vuelves cuando tú quieres, para tú conveniencia. Tú antes de mí. Tú ante todo y yo ante nada.

 Esto no puede seguir así. Debería terminar con todo y quedarme con el nada. Atar los cabos de mi tripulación y embarcarme en mi propio rumbo.

 ¿Y si me desvío del destino que tenía pensado? (Pensado no es la palabra indicada cuando te has auto convencido imponiéndote un destino, al final he acabado por convencerme de que me agrada). Di  tú, pues qué hago yo.

  Mi vida gira entorno a alguien y me estoy cansando. Yo también me agoto...
Sólo porque mi mente o lo que sea de mi ser que decide no desprenderse de tú persona. Necesito tiempo, tiempo para mí.
 Tengo que ser fuerte para cuando te hayas ido del todo, aunque ahora te estás desvaneciendo poco a  poco y parece ser que no lo has comprendido aún.

 Eres así.

 Vuelves y duele matándome sutilmente, asfixiándome. Pienso que soy una 'obligación' , tú obligación.


 ¿Dónde me voy quedando yo? Dímelo si tienes respuesta.

Estancada, esperando a que huyas de mi mente y ,sobretodo, de mi vida.





No hay comentarios:

Publicar un comentario